Conclusiones del 2014… y ¡¡¡ FELIZ 2015 !!!

A unas horas de acabar 2014, uno no hace más que decir ¡¡¡ FELIZ 2015 !!! Ha llegado el momento en el que todo el mundo recuerda lo vivido, la gente con la que lo ha compartido y quiere desearles un año venidero fantástico. Y, por supuesto, yo no voy a ser menos, publicando este post especialmente pensado para todos los que me seguís por aquí (y no tengo otra forma de contacto). Pero, por supuesto, para todos aquellos que se verán mencionados.

Hoy es último día del año y toca hacer resumen, conclusiones y recopilación. Toca plasmar como han ido estos 365 días del 2014. Porque es de las pocas cosas que por estas fechas me gusta hacer. Y, como vengo haciendo en años anteriores, que mejor que compartirlo por aquí.

Primero quiero hablar de mi lado cuentero. Ha sido un año de mucho camino y desarrollo. De mucho aprendizaje. De cerrar etapas y abrir nuevas. De comenzar a cimentar mi camino en solitario. Un año en el que ha habido estrenos, fallos, bajadas, momentos compartidos y mucha reflexión en torno a mi situación actual en este oficio.

Uno de los hitos importantes de este ámbito profesional ha sido estrenar en febrero mi primera sesión de cuentos para adultos. Una sesión que, por suerte sigue caminando y siento va creciendo. Que incluso he llegado a contarla en el mítico Café Libertad 8 (sesión que grabé para hacer un vídeo promocional) Con la que cada vez disfruto más. Pero, también he estrenado hace poco una nueva sesión infantil / familiar. Así que, año productivo.

En lo que se refiere a aprendizaje, en junio decidí acabar mi proceso en La Escuela de Cuentacuentos. Algo más de 3 años a las espaldas han dado para mucho y sentía que era momento de cerrar esa etapa y continuar aprendiendo por otro lares. En paralelo, también aprendí de Hector Urién. Y, en este último tramo del año he comenzado con Nieves Pérez (de Borrón y Cuento Nuevo). Así que, puedo considerarlo el más completo de todos.

Por supuesto, también ha habido debate y reflexión. Muchas charlas y horas compartidas en torno a los cuentos, mi situación profesional, posibilidades del cuento… Esto se vio reflejado en 4 post publicados: 2 sobre “iniciar el camino como cuentero”; y otros 2 sobre “Trabajo Social y Cuentos”.

En mi otra vertiente, la de formador, decir que también este año me he estrenado. En febrero marzo realicé mis primeros talleres. Que mejor que fueran en la Facultad de Trabajo Social de la UCM, ese espacio donde he aprendido tanto y me ha hecho llegar hasta aquí. Y ahí no quedó la cosa, porque también he organizado talleres por mi cuenta. Concretamente de Teatro Social. Uno por circunstancias finalmente no salió (el de julio). Pero en noviembre me resarcí con un fantástico fin de semana de compartir, enseñar y aprender sobre esta herramienta que tanto me apasiona.

Por otra parte, una grata experiencia en torno a esto de formar ha sido el taller de “Habilidades para hablar en público” con persona con tartamudez. Una oportunidad que me motivo desde que surgió. Además que, por suerte, hay posibilidades de producirse más veces (eso espero) durante el 2015. Y no me olvido de mis momentos formativos compartidos con Nelson Calderon en Zinc Shower y Utopic_US en torno a este tema.

No quisiera acabar sin hablar de mi lado más personal. Porque si, lo ha habido e incluso ha tenido mucha influencia en mi “ser profesional”. Esto se vio reflejado en el post titulado “Cuando la marca personal se come a la persona”. Hoy os cuento que ha sido un año de muchas emociones y vivencias duras. Un año en el que me caí y hundí en el lodo durante un tiempo, pero que, poco a poco he sido capaz de salir y seguir caminando. Un año de un aprendizaje sobre mí mismo muy profundo. Esto gracias al apoyo y los buenos momentos compartidos con gente que quiero y aprecio (algunos que he conocido este mismo año). Pero puedo deciros que tengo la sensación que ha asentado unas buenas bases y que en este año venidero veré muy buenos resultados.

Así, con esta última reflexión, me despedido. Porque con todo lo comentado siento que, el 2014 ha sido un año en el que tomar conciencia en todos los niveles de que quiero hacer realmente con mi vida. Y se han puesto esas primeras piedras que permitirán seguir construyendo mis sueños.