Una ubicación fantástica porqué me resultó una ciudad muy acogedora. Un Palacio de Congresos pésimo, en el que los fallos tuvieron que solventarse desde la organización. Una organización horaria con pequeños detalles a mejorar. Una edición internacional que ha traído un nuevo aire. Un regalo que me presenta dudas aunque me parezca bonita idea. Estas son las primeras reflexiones que hago tras el #CongresoTS en Mérida.
De vuelta del #CongresoTS en Mérida
Ya más que de vuelta del #CongresoTS en Mérida. Aunque hayan pasado un par de días, aún el cansancio hace mella. 3 días intensos, de mucha actividad (y algo de fiesta, no vamos a negarlo), terminan pasando factura.
Por otra parte, este pequeño margen ya da para lanzar un cierto análisis / evaluación sobre cómo fue el XIII Congreso Estatal y I Congreso Iberoamericano de Trabajo Social. Tras parar y desconectar un poco, las ideas se ordenan y permiten elaborar un relato más asentado.
En definitiva, que ya se está en cierta disposición para plasmar por escrito lo que iba saliendo en múltiples conversaciones durante el evento (y el viaje de vuelta, que también da para mucho). Y aquí me lanzo a ello.
Evaluación por aspectos clave
Para afrontar esta evaluación posterior, me ha parecido práctico hacerlo agrupando las ideas en base a diversos aspectos clave. Y de cada uno de ellos comentar ciertos detalles. Así que, aquí va arranca mi análisis:
LA UBICACIÓN
Mérida me pareció una ubicación fantástica. Una ciudad que, aunque la disfruté poco a fondo, me resultó acogedora. Quizá lo negativo es la ubicación de su Palacio de Congresos, al otro lado del río, requiriendo pasar el Puente Lusitania al que yo denominé “puente infernal” (por su longitud de casi 500 m., que visto desde lejos es bonito, pero para pasearlo es algo soso y se me hacía eterno).
Igualmente, que Mérida fuese la ciudad escogida, permitió tener posibilidad de organizar la inauguración en el Teatro Romano. Hacerla allí, en este espacio emblemático, daba un empaque especial e histórico a esta edición del Congreso.
EL ESPACIO
Aquí, no puedo negar que el Palacio de Congresos de Mérida me resultó pésimo. Cuándo digo esto lo hago refiriéndome a la organización de espacios. Esta resultaba una suerte de laberinto para ir de un auditorio o aula a otro, con los baños más que escondidos y sin señalética alguna (y la que había, solo por escrito, nada adaptada).
A eso le añadimos lo que me pareció el colmo: por una parte, auditorios dónde la puerta de acceso estaba junto al lugar de presentaciones (de frente al público). Y por otra, que el auditorio principal no contaba con instalación de sonido. Como llegué a decir, creo que ni Calatrava lo hubiera hecho peor.
Sobre esto, cabe decir que la organización del Congreso no tiene nada de culpa ni responsabilidad en esto. De hecho me pareció lo habían solventado correctamente. El aspecto de orientación, añadiendo cierta señalética (a mejorar que fuera algo más visible). Y el aspecto de sonido, quizá sí que se quedó algo corto (solo amplificadores en a ambos lados del escenario), pero es que el auditorio tampoco es que tuviera buena acústica.
También comentar algo que la organización si tiene responsabilidad. Creo que el Palacio de Congresos se les quedó pequeño y que tenía menos aforo que asistentes. Me refiero, sobre todo, al auditorio principal. Me llegó información que había habido problemas para entrar a ciertas ponencia marco por aforo completo. Y también en otros auditorios y en las aulas (para las mesas de comunicaciones, de debate y talleres). Incluso que se crearon «listas de espera». Yo esto solo lo pude ver en la mesa de comunicaciones a la que asistí el sábado tarde. Pero si escuché a más gente comentarlo en conversaciones de pasillo.
Por otra parte, a valorar positivamente que el material utilizado para stands fuese de cartón. Es un material reciclable, algo que va mucho con la idea de sostenibilidad de este #CongresoTS. Y esto, junto a las exposiciones y otros elementos decorativos, dieron un aspecto acogedor al Palacio.
Además de ello, me resultó interesante que los auditorios y aulas tenían nombres de países iberoamericanos y los espacios de paso y encuentro, nombres romanos. Aunque considero que, quizá, pasó algo desapercibido este aspecto. Sobre todo en lo referido a auditorios y aulas. Y, para otra vez, en vez de mencionarlos en programa por el número, sería mejor por el nombre (cosa que hubiese ayudado a orientarse, ya que había Auditorio 3 y Aula 3, y eso generaba cierta confusión).
EL EVENTO
Cuando hablo del evento me refiero a aspectos de cronograma, nombre, regalos… Son algunos aspectos propios de esta edición que merecen una mención por separado.
El primer aspecto es la organización horaria. Más allá de los comentarios de la gente de “las cosas se solapan y no puedo ir a todo lo que me gustaría” (cosa obvia en un evento de estas características. Dejemos de decirlo, que nadie nos va a criticar por elegir), sí que me surge una propuesta. Quizá sería oportuno que hubiera 10 minutos entre bloques organizativos. Con este tiempo se facilita el desplazamiento de la gente de un lugar a otro. Así se podría empezar y acabar más puntual con mayor facilidad.
En segundo lugar recordar que este era el I Congreso Iberoamericano de Trabajo Social. Considero que esta congregación ha sido muy positiva. Incluir una dimensión internacional ha aportado un nuevo aire al evento con respecto al anterior. Siempre es oportuno recibir, otras visiones y realidades que vienen del otro lado del Atlántico. Esto nos permite contrastar con las nuestras y tomar nuevas ideas. Aunque, en este punto puedo ponerle un pero. Creo que ha faltado dar algo más de presencia a Portugal (que por algo era “ibero”). Y es que he escuchado y visto menos alusiones a nuestro país vecino y si muchas a Latinoamérica.
Por último hago una mención al regalo del #OlivoTS. Decir que a mí se me pasó cogerlo. Pero reconozco que no me ha apenado. Porque me surgió una pregunta: ¿y dónde lo pongo? Esta cuestión se plantea desde hacerlo crecer (como se motivaba desde la organización), pensando en los que vivimos en un piso en una ciudad. Y a esto hay que agregarle las dificultades que podía generar su transporte, sobre todo para los que viajaban en avión. O las posibles restricciones para introducir ciertas especies vivas en los lugares de origen (como se puede leer en esta noticia del pasado julio), especialmente Latinoamérica. A pesar de todo esto, entiendo la metáfora y me parece una bonita idea. Quizá para otra vez, darle una vuelta de tuerca a algo más práctico para cualquier persona.
LA ORGANIZACIÓN
El último aspecto al que hago alusión es la base de todo lo anterior. Creo que no es lo mismo evaluar externamente, que si formas parte. Pero si hay comentarios que se pueden hacer. Sobre todo para poner en valor y felicitar la labor del equipo organizativo y de voluntarios.
Partiendo de esto, no dudo ni un segundo en dar la enhorabuena a la organización. En primera instancia al Consejo General, por ser el principal, poniendo especial hincapié en su personal técnico, que tan buena labor oculta realizan. Porque, como siempre pienso, cuándo algunas tareas y labores importantes apenas se ven, es que están ejecutadas casi a la perfección. Y si hay pequeños detalles a mejorar, solo tienen que ser percibidos por el propio equipo.
Así también, merece especial mención el Colegio de Trabajo Social de Badajoz. Como explicó Antonio Nisa (el Presidente) en varias ocasiones, es un colegio pequeño y periférico, con una Junta de Gobierno joven. Por ello, asumir la coorganización era un reto alto. Pero creo que pueden decir con orgullo que consiguieron cumplir con creces. Y el ejemplo está en haber conseguido el Teatro Romano para la inauguración, algo que el Trabajo Social se lo agradecerá eternamente.
Concluyendo… por hoy
Hasta aquí puedo escribir hoy. Poniéndome a realizar mi análisis y evaluación, de pronto me salía material para 2 artículos. Por eso dejo aquí este post, en el que he desgranado los aspectos más organizativos del #CongresoTS en Mérida.
Anticipar que en el próximo post abordaré aspectos más relativos a los diversos actos y el contenido. Así, podréis saber mi opinión sobre la inauguración, las ponencias marco y las mesas de comunicaciones, de debate y talleres.