Un Congreso de Trabajo Social innovador y del que aprender para seguir mejorando en el futuro. Así podría resumir mi evaluación de lo que fue el XII Congreso de Trabajo Social celebrado la pasada semana. Porque hubo cosas nuevas bastante interesantes, conjugadas con pequeños aspectos a mejorar.
Después de mi pasado post sobre este mismo evento, desde un lado más emocional y personal, toca el turno de plantearse un análisis de otros aspectos más “objetivos” (dentro de la medida de lo posible). Porque creo resulta interesante también aportar a los organizadores diferentes visiones, con esos puntos fuertes y débiles de cara a próximas ediciones o eventos similares.
Algunos aspectos positivos
Primero de todo, vaya por delante mi felicitación por el enorme trabajo realizado para conseguir que se llevase a cabo tan magno evento. Un Congreso al que asisten 1.300 personas no se organiza en un chasquido de dedos. En el computo general del evento la evaluación fue muy positiva puesto que se favoreció mucho el encuentro entre profesionales, entre personas. Y, como ya comenté en mi post anterior esto no nos viene mal recordarlo, porque, como dice Nacho Santás en su post, a veces la dinámica laboral puede llevar a ser un “turbogestor y olvidarse de esas personas y narrativas que hay detrás de un expediente”.
Otro aspecto positivo fue la apuesta por las TIC y las redes sociales. Entregar la tablet me pareció, desde el primer momento muy interesante porque implicaba su uso obligatorio. Esto, para los más perdidos en su uso o los que lo rechazaban era muy positivo, porque favorecía romper esa dinámica. Además, como ya comenté en el post del Dia 1, venía toda la información en el dispositivo en iconos directos, lo que simplificaba su utilización, favoreciendo así el “cogerle el gustillo y el truco” (ya sabemos que cuando algo nos resulta muy complicado de utilizar acabamos desechándolo rápidamente).
Sobre el «Congreso 2.0» y «La Plaza»
En relación a conseguir hacer un “Congreso 2.0”, utilizando las redes sociales y el HT #CongresoTS, las tablet eran un elemento importante. Pero nos encontramos con una dificultad, la conexión a Internet. La Wifi abierta para tal fin no daba a basto (yo intenté conectarme el primer día y acabe desistiendo. Y mucha gente acabó tirando de la red privada existente). Sería interesante conocer la causa de ello para paliarlo en el futuro si se pretende seguir con este modelo (personalmente creo que hay que apostar por él). Desde mis conocimientos “frikis” sobre el tema, creo que la causa pudo venir por una saturación de red ante tantas conexiones simultaneas (y no estoy refiriéndome a 1.300 a la vez). Con todo esto, pues finalmente muchos terminamos utilizando nuestros smartphones y tirando de la tarifa de datos (que a pesar de la saturación de gente fluía muy bien).
También me resulto muy positivo el espacio de “La Plaza”. Este iba muy enfocado a dinamizar el Congreso , ser un punto de encuentro entre profesionales. Creo que cumplió con su objetivo. Si bien es cierto que durante los horarios con mesas de comunicaciones y debate no había demasiado ajetreo (estuve en alguno de esos momentos), en los momentos de descanso la mayoría de la gente subía. También motivaba a ello saber que había diferentes acciones o actividades que dinamizaban el espacio y esos momentos. Estos me gustaron especialmente porque todos tenían un toque relacionado con el Teatro Social (o arte social en cualquiera de sus vertientes), ya que hubo baile en silla de ruedas, un flashmob, un “entierro de los Servicios Sociales”, yo mismo conté cuentos… Y todo esto me resulta imprescindible en un evento de este tipo porque, implícitamente está mostrando que esta herramienta (el Arte, el Teatro) es útil para nuestra profesión.
Algunos aspectos a mejorar
Por otra parte, un punto a mejorar en este espacio (también seguiría apostando por él) es el tema de las actividades paralelas. En momentos había programadas 3 y 4 actividades simultáneas dentro del total del espacio. Si, había distribución mediante “modulos-stand”, pero estos eran abiertos y con recursos básicos. Por ello, llevar a cabo talleres como el de GTD de Nacho Santás o el nuestro de la #BlogoTSfera fue algo complicado.
Un último punto a comentar es el relacionado con las mesas de debate y comunicaciones. Estaba muy bien que hubiera muchas y de diversos temas, dando así la oportunidad a muchas personas exponer su trabajo, permitiendo repartirse y acudir a la que te interesase más (en muchos casos por interés profesional de ser tu campo en activo). Pero me ocurrió en varios casos que había mesas en las que había 2 y 3 comunicaciones demasiado iguales, que me contaban lo mismo, lo que hacía algo tedioso seguir el total de la mesa (esto de las que acudí, pero hablando con gente de la BlogoTSfera y otras personas, que habían acudido a otras mesas, en ocasiones también comentaron lo mismo).
Algo intrínseco a esto anterior también lo considero un aspecto a mejorar. Pero no es algo de la organización, sino de los profesionales en sí mismo. Necesitamos mejorar nuestras habilidades de hablar en público. No porque lo hiciera yo, pero me faltó ver a más gente exponiendo de pie. Por supuesto que se puede llegar al público y explicar muy bien estando sentado y detrás de la mesa. Pero percibía en muchos casos (quizá por mi “deformación” profesional como narrador) que había muchos nervios, temores y falta de preparación (en definitiva, falta de desarrollo de las habilidades relacionadas), lo que hacía que la gente se escudase en la mesa y el papel para exponer. Además, ví que se utilizaba en demasía las presentaciones en Power Point poco eficaces (con mucho texto que hacen que pierda la atención de quién me lo está contando). E, incluso, casos en los que se leía, sin levantar la mirada hacia los presentes, lo que no ayuda a provocar esa conexión con el público.
Aclarar que claro que hubo gente que se levantó para presentar y hubo buenas intervenciones. Pero, si hago hincapié en ello es porque considero muy positivo reforzar estas habilidades de cara a 2 aspectos, el trabajo con grupos y comunidades (implícitamente es como hablar en público) y a la hora de “vender” nuestros proyectos (en muchas ocasiones tenemos que explicarlos para que este pueda salir adelante). Mejorando el hablar en público seremos más eficaces y eficientes en estas 2 situaciones.
En resumen…
Fue un Congreso de Trabajo Social con mucha innovación, con ganas de probar cosas nuevas para nuestra profesión, pero que hubo errores de primera vez que estoy seguro se solventarán en el futuro. Porque, como he repetido varias veces, hay que apostar por seguir siendo creativos y novedosos, porque esto también refuerza seguir mejorando el Trabajo Social.
¡Gracias por incluirme en tu entrada! Comparto plenamente lo que dices. Lo de las TIC fue un acierto (no es por nada, jejeje) y el encuentro entre compañeros, lo mejor…Un gustazo poneros cara y cuerpo…